Más peligroso que una piraña en un bidé

 

Trabaja menos que el sastre de Tarzán.
Más peligroso que  Gremlins cantando bajo la lluvia.
Es más feo que cobrar las bolsas en el supermercado.
Te miras más al espejo que la madrastra de Blancanieves.
Menos erótico que las memorias del oso Yogui.
Más pesado que un discurso de Fidel Castro
Más contento que McGyver en un desguace.
Más quemado que el mapa de Bonanza.
Estás más ilocalizable que Papá Noel en Nochebuena.
Estas mas perdido que la aguja del pajar.
Más peligroso que una piraña en un bidé.
Estás más chupado que la pipa de un indio.
Menos futuro que un enfermo de Parkinson robando panderetas.
Más peligroso que un tiroteo en un ascensor
Menos luces que una lancha de contrabando.
Más nervioso que Pinocho en la máquina de la verdad.
Es más inocente que el 28 de diciembre.
Chupa más que Drácula con una esponja.
Tiene un trabajo más penoso que el maquillador de Rossy de Palma.
Trabajas más que la paloma de la paz en una negociación de desarme.
Provoca más espanto que la firma de Frankestein.
Es más simpático que una soprano tartamuda.
Es más pesado que un traductor simultaneo tartamudo.
Más aburrido que el Hombre invisible haciendo sombras chinescas
Es más llamativo que la cucha del perro del Taj Majal.
Hay más espacio que en una película de Star-Trek
Más peligroso que un grafittero en las cuevas de Altamira


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